El campo de las relaciones internacionales en los países del Tercer Mundo se ha descrito con frecuencia en términos de la «hegemonía intelectual» de modelos estadounidenses. No obstante, una comprensión adecuada de los nexos que existen entre conocimiento, poder y hegemonía necesariamente exige un mayor entendimiento de las maneras concretas en que esta relación se da en escenarios específicos. América Latina, región que ha formado parte de la esfera de influencia de Estados Unidos, sirve como un caso de estudios representativo para la exploración de patrones de dominación intelectual, y de la manera como el conocimiento formulado en el país del norte es asimilado por los estudios internacionales en otras latitudes. El libro explora el estado de los estudios internacionales en América Latina, a fin de esclarecer el proceso de construcción del campo disciplinario en la región, así como los marcos teóricos que han orientado su enseñanza e investigación. A lo largo del análisis, se evidencia una tensión entre las influencias intelectuales provenientes de Estados Unidos y la búsqueda de marcos teóricos propios, en cuyo esclarecimiento se fundamentan condiciones de posibilidad de un pensamiento verdaderamente emancipatorio en las relaciones internacionales latinoamericanas.