Este libro, publicado por primera vez en el 2003, constituye un raro esfuerzo por describir y conceptualizar la relación entre el sector privado y la política en Colombia. Basado en un momento turbulento del pasado reciente colombiano -los suecos en torno al «proceso 8000», que cuestionaron la financiación obtenida por la campaña presidencial de Ernesto Samper (1994-1998), pusieron sobre el tapete la relación entre política y narcotráfico y plantearon, seriamente, la posibilidad de una renuncia presidencial-, el libro identifica a varios actores empresariales como protagonistas centrales de los eventos utilizados como telón de fondo. Los principales gremios recomendaron la renuncia al presidente, temerosos de las posibles sanciones económicas impuestas por Estados Unidos. Sin embargo, no lograron mantener un frente unido en torno a su propósito político, en parte porque varios grandes grupos económicos apoyaron al presidente. Al analizar la relación entre estos dos disímiles actores empresariales y abordar la pregunta acerca de qué explica el apoyo o la oposición de sectores empresariales a determinadas políticas o gobiernos, el libro trasciende el momento histórico que utilizó como fondo y provee un marco analítico adecuado para analizar qué quieren los empresarios en política, cuándo son efectivos, de qué herramientas de presión disponen y cómo se afectan mutuamente en el logro de sus objetivos.