Invitamos a los nuevos profesores de la Facultad a compartir con nosotros un poco sobre lo que hacen y sobre sus intereses de investigación. Esto fue lo que nos contaron:
Catalina Muñoz Rojas
Soy historiadora egresada de la Universidad de los Andes. Hice una especialización en museología en el Harvard Extension School y posteriormente un doctorado en historia en la Universidad de Pennsylvania, donde me concentré en la historia sociocultural de América Latina moderna. En mi tesis doctoral examiné la relación entre el proceso de formación del estado colombiano durante la llamada República Liberal (1930-1946) y la formulación y aplicación de políticas culturales, incluyendo programas de cine y radio educativa, educación musical, democratización del teatro e investigación antropológica. Me interesaba estudiar la forma como estos programas, lejos de ser políticas neutras inspiradas por un ‘interés nacional’, hicieron parte del proceso histórico de legitimación y naturalización del poder de quienes representaban al estado. El objetivo era iluminar lo que sabemos sobre el proceso de formación del estado colombiano a partir de la observación de la operación cotidiana de prácticas y representaciones hechas a nombre del estado, así como de la interacción entre estos esfuerzos de dominación y las respuestas de autonomía y acomodación.
Actualmente, estoy comenzando una investigación que surge de una preocupación por la relación entre el trabajo del historiador académico y la producción de narrativas históricas fuera de la academia. A partir de la combinación de trabajo de archivo con trabajo de campo —y en colaboración con colegas antropólogos y sociólogos— trabajo en un proyecto que se pregunta por la producción de narrativas históricas y los conflictos en torno a ellas en el caso de los indígenas arhuacos y sus memorias de la presencia de la misión capuchina en Nabusímake entre 1917 y 1982. Mi motivación es romper con el aislamiento de mi práctica como historiadora tanto dialogando con otras disciplinas, como acercándome a las comunidades que estudio. Creo que la investigación de los historiadores tiene mucho para ganar al abrirse al diálogo con públicos no especialistas.
Mónica Pérez Trujillo
Realicé mis estudios de pregrado en Psicología e Historia en la Universidad de Los Andes (2001), y obtuve un Master (2005) y un Doctorado (2012) en Criminología de la Universidad de Melbourne. El foco de mi investigación es la violencia interpersonal, especialmente entre adultos, la cual estudio desde las perspectivas interaccionista, de género y sociocultural. Tengo más de 10 años de experiencia en el estudio y análisis de patrones de agresión interpersonal y evaluación de iniciativas de justicia, en particular en violencia doméstica, consumo de drogas y evaluación del riesgo de reincidencia y victimización. También, he trabajado en el diseño y evaluación de líneas de acción dirigidas a proteger a las víctimas de violencia en proyectos conjuntos con la Policía y el Departamento de Justicia de Victoria (Australia).
Florencia Reali
Soy bióloga de la Universidad de la República, Montevideo (Uruguay), y doctora en Psicología de Cornell University en Ithaca, New York. Desde agosto del 2012 soy profesora en el Departamento de Psicología. Mi área de especialización es el de las ciencias cognitivas con énfasis en los procesos asociados a la psicología del lenguaje. Mis intereses de investigación giran en torno a la compleja relación entre el lenguaje y el pensamiento, así como la interacción de estas con la cultura. Una de las preguntas principales que motiva mi trabajo es: ¿cómo influye el uso del lenguaje en la forma como organizamos nuestro pensamiento y construimos categorías y conceptos sobre el mundo que nos rodea? En particular, uno de los proyectos en los que trabajo actualmente se centra en investigar el rol de la metáfora en la construcción de conceptos abstractos, así como en el procesamiento cognitivo no lingüístico. Por otro lado, realizo investigación en el área de desarrollo y procesamiento del lenguaje; específicamente, estudio cómo los conocimientos lingüísticos del niño y del adulto son moldeados por la experiencia. Adicionalmente, he trabajado las diferentes teorías que existen sobre la evolución del lenguaje y la transmisión cultural, sobre lo que mis resultados sugieren que el cambio lingüístico (diacrónico) depende de complejos procesos de coevolución biológica y cultural que determinan la forma y el contenido de la lengua.