Por: Samuel Guerra – Dirección de Sin Corbata
La honestidad más profunda en la vida radica en la escasez del tiempo que a menudo se nos concede. Sin embargo, el esfuerzo no cesa, y es el compromiso lo que nos impulsa a continuar con los objetivos del periódico. Conscientes de que ha transcurrido un prolongado lapso desde que alguna edición de Sin Corbata haya visto la luz del sol, comenzamos con unas disculpas sinceras a aquellos lectores expectantes. Especialmente a quienes solían hojear nuestras ediciones y leer con paciencia la voz de los estudiantes que se expresaban a través de las letras y el periodismo. Así mismo, nos disculpamos con el estudiantado, puesto que se le ha privado de un espacio de expresión y autodescubrimiento. Esperamos que, mediante la actividad del periódico en medios digitales, como nuestras redes sociales, y medios tradicionales, como la presente edición, la espera no haya sido eterna y que podamos recuperar ese espacio para diversas formas de expresión.
Por otro lado, como podrá notarse, el lanzamiento de esta edición coincide con el aniversario número 75 de la Universidad de los Andes, y, casualmente es el mismo año en el que Mario Laserna, fundador de la universidad, habría cumplido 100 años. En ese cúmulo de eventos se le suma el hecho de que la Facultad de Ciencias Sociales fue la encargada de organizar esta celebración. Es por todo ello que Sin Corbata quiere homenajear a la facultad por brindar el apoyo que hizo posible esta nueva edición. No en vano, encontrará en las próximas páginas múltiples contenidos que se inscriben al lema de la celebración de este año, la diversidad. Debido a que no se concentran en escritos, sino que se extrapolan a poemas y caricaturas, demostrando que la diversidad también se encuentra en las formas de comunicación.
En los tiempos agitados en los que vivimos, llenos de polarización y discursos de odio, las diversas formas de expresión juegan un papel clave en la construcción de un país democrático. Puesto que nos instan a comprender opiniones opuestas, a leerlas, verlas, consumirlas y, quizás, encontrar en ellas disfrute. Este papel cobra aún mayor relevancia en este año electoral, en el cual las calles se vistieron de colores contrarios y los conflictos se agudizaron. Por tanto, les invitamos a expresarse libremente, pero sin imponer una visión, sino entender las otras miradas. La virtud que poseemos como jóvenes radica en nuestra capacidad para superar la división heredada en nuestro país. Por ello, les pedimos que no pasen por alto sus habilidades.
Finalmente, le agradecemos tanto a los profesores como a la dirección del Departamento de Ciencia Política y Estudios Globales quienes nos brindaron el espacio y tiempo para hacer posible esta edición. También agradecemos a todxs que dieron su esfuerzo para construir el contenido que hoy se encuentra en nuestras manos. La revitalización del periódico es palpable en la tinta inmersa en estas páginas gracias a cada uno de ustedes. Sin más preámbulos les invito a explorar (amar, odiar, analizar, etc.) la Edición 31.