lunes 25 de enero 2021
A partir de este semestre, decidimos invitar a profesores/as de Ciencia Política de otras universidades a escribir para el Boletín DePolítica en algunas ocasiones. Esta columna fue originalmente publicada en El Espectador. El autor estuvo de acuerdo en republicarla acá. Las opiniones expresadas pertenecen al firmante de la columna y no al Departamento de Ciencia Política de Uniandes.
Por: Juan Gabriel Gómez Albarello, Profesor Asistente del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales, Universidad Nacional de Colombia
Hace muchos años, hice parte del equipo de investigadores de la Comisión de la Verdad para El Salvador. Esta experiencia, así como lo que he aprendido desde entonces, informan la perspectiva que quisiera ofrecer acerca de los desafíos que tiene la Comisión de la Verdad (CV) para cumplir un papel positivo en el proceso de reconciliación en Colombia.
Desde su creación, el postulado de que la CV podría cumplir tal papel ha sido puesto en cuestión. La CV ha sido atacada vehementemente por aquellos que sospechan que será usada por la izquierda política para ganar en el imaginario colectivo lo que las Farc nunca pudieron alcanzar a sangre y fuego.
Sobre la CV pesan, además, otras objeciones, de carácter mucho más general, en contra de la conveniencia de recordar un pasado violento: una que solo sirve para deprimirse; otra, para llenarse de ira y cobrar venganza.
En el cuento “El Sermón”, del escritor Haim Nazaz, el personaje central, Yudka, objeta a sus compañeros la utilidad que puede tener la enseñanza de la historia del pueblo judío. “Persecuciones, masacres, martirios y pogroms. Y más persecuciones, masacres, martirios y pogroms.” Según el mismo Yudka, lo mejor que podría hacer un maestro sería decirles a sus pupilos, “No tenemos ninguna historia. No hemos tenido una desde el día en que nos empujaron al exilio. Se acabó la clase. Ahora pueden salir e ir a jugar.”
El periodista David Rieff llegó a una conclusión más o menos similar. Motivado por su experiencia en Bosnia, escribió el libro Contra la Memoria . En él sostiene que si el olvido puede ser una injusticia con el pasado, esto no significa que recordar no sea injusticia con el presente. Al inundar nuestra atención de los agravios pretéritos, la memoria puede hacer imposible la convivencia. Uno de los casos ejemplares de este fenómeno sería la guerra que llevó al desmembramiento de la antigua Yugoslavia.
A partir de este semestre, decidimos invitar a profesores/as de Ciencia Política de otras universidades a escribir para el Boletín DePolítica en algunas ocasiones. Las ideas aquí expresadas pertenecen al firmante de la nota y no al Departamento de Ciencia Política de Uniandes.
En el marco del proyecto colectivo titulado “Entre Fusiles y Acordeones. Las FARC EP y Su música (1988-2018)” y financiado por Capaz pudimos establecer que, de las 600 canciones grabadas por artistas pertenecientes al antiguo grupo insurgente, el 44% correspondían al género vallenato. También establecimos que dos de los principales intérpretes – Julian Conrado y Lucas Iguarán- habían grabado canciones vallenatas antes de entrar a la insurgencia y que incluso Julián Conrado participó en el Festival de la Leyenda Vallenata a mediados de los años 80.
La constatación estadística sobre la importancia del vallenato dentro de la música de la guerrilla nos ha llevado a rastrear la “historia político-cultural” del género, así como a pensar en las implicaciones “políticas” de que la guerrilla hubiera abrazado esta música como suya.
En el proceso, además de aprender sobre la importancia que esa música, y el Festival de la Leyenda Vallenata tuvieron, en la campaña política a favor de la creación del departamento de César en 1967, descubrimos que numerosos actores políticos e intelectuales de los años 60 y 70 encontraron en esa música una herramienta para la acción y la movilización política.
Una interesante huella de esos procesos de “politización” del Vallenato es la siguiente fotografía1 en la que un risueño maestro de sociología y avezado activista -Orlando Fals Borda- acompaña en la tarima del VIII Festival al músico Cordobés Máximo Jiménez. La foto es de 1975 y para ese entonces ambos- Fals Borda y Jiménez, habían promovido el vallenato en distintos encuentros de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos- ANUC-. Incluso se hablaba de los trabajos musicales de Jiménez como “vallenato protesta”. Desde nuestra perspectiva, para entender la importancia política y musical del vallenato en las FARC EP es necesario recordar cómo otros actores sociales y políticos acudieron a ese género musical en sus iniciativas académicas y políticas.
1Esta fotografía pertenece al archivo fotográfico de la Colección Documental Orlando Fals Borda, donado al Banco de la República en mayo de 1986 y que forma parte del Centro de Documentación Regional Orlando Fals Borda en Montería. Una discusión sistemática sobre la trayectoria del “vallenato protesta” en el trabajo de Ivan Zabalaleta titulada “El vallenato de “protesta”: la obra musical de Máximo Jimenez” . Bogotá: Magister Musicología. Bogotá: Universidad Nacional de Colombia, 2017. Esta y otras muy interesantes fotografías de Jiménez y Fals
Es Profesor de Relaciones Internacionales e Investigador en la Universidad de Cambridge (Reino Unido)1 . Recibió su doctorado en Ciencia Política por la Universidad de Minnesota (Estados Unidos) en 2013 y luego se desempeñó como investigador posdoctoral del Centro Niehaus para la Globalización y la Gobernanza de la Universidad de Princeton y el Instituto Watson de Estudios Internacionales de la Universidad de Brown. También fue profesor del Centro de Investigación y Docencia Económicas en Ciudad de México.
Sus intereses de investigación combinan teoría de las relaciones internacionales, historia internacional e historia del derecho internacional, con un interés específico por entender los orígenes políticos, el diseño y los efectos del derecho internacional humanitario y los derechos humanos. Ha publicado numerosos artículos en revistas reconocidas y su primer libro, titulado Lawmaking under Pressure: International Humanitarian Law and Internal Armed Conflict, será publicado este año por la Universidad de Cornell.
Antes de adelantar sus estudios doctorales en Estados Unidos, fue investigador en Congreso Visible, la Fundación Ideas para la Paz y la Fundación Friedrich Ebert. Se graduó como Politólogo y Profesional en Lenguajes y Estudios Socioculturales de Los Andes en 2005.
1En Cambridge, es Profesor Asociado del Departamento de Política y Relaciones Internacionales (POLIS) e Investigador del Christ’s College y el Centro Lauterpacht de Derecho Internacional.
El profesor Juan Carlos Rodríguez-Raga publicó junto a Santiago Virgüez, egresado del Departamento, un capítulo en el libro Policy Analysis in Colombia. El capítulo se titula Policy Analysis in the Colombian Constitutional Court y puede acceder a éste aquí.
Ayer el Semillero en Seguridad y Defensa del Departamento publicó el primer informe semanal sobre Venezuela, para el Observatorio Sudamericano de Defensa y Fuerzas Armadas. Léalo aquí.
Colombia Internacional es la tercera más consultada entre las revistas de la Universidad (después de la RES e Historia Crítica). Ha recibido más de 125.000 visitas entre enero y agosto de 2020.
Mañana jueves 10 de septiembre a las 10am continúa la Cátedra de Paz, organizada por la Comisión de la Verdad, el Comité de Paz y el semillero Historia entre Todos. La conversación girará entorno a la relación entre género y conflicto en la construcción de verdad y estará mediada por Maria Emma Wills, exdirectora del Departamento. Para mayor información haga clic aquí.
La profesora Laura Wills-Otero presentará esta semana en la reunión anual de la American Political Science Association su artículo «Business and New Right-Wing Parties in Latin America. Argentina and Colombia in Comparative Perspective» en coautoría con Gabriel Vommaro del Instituto de Altos Estudios Sociales, Universidad de San Martín/CONICET. Juan Diego Prieto, investigador posdoctoral del Departamento, presentará por su parte «P rosecuting Pluralism: Local Accountability and Political Outsiders in Colombia». Mayor información aquí.
«Hay luz al final de la tesis: la cocina de la investigación» es el nombre del coloquio de sociología que se llevará a cabo hoy a las 5:30pm. Diego Leal, egresado de la Maestría en Ciencia Política, Daniela Fazio y Maria Ximena Dávila presentarán sus trabajos de grado. Link al evento aquí.
Los representantes estudiantiles del Departamento organizan este viernes a las 5pm una charla el profesor Felipe Botero sobre todo lo que hay que saber para disfrutar esta temporada de ciclismo. Acceda al evento aquí.
Directora
Laura Wills-Otero
Asistente Editorial
Santiago Vanegas
Diseño Gráfico
Andrés Felipe Montoya
Ossman Aldana
Universidad de los Andes | Vigilada MinEducación
Reconocimiento como Universidad: Decreto 1297 del 30 de mayo de 1964.
Reconocimiento personería jurídica: Resolución 28 del 23 de febrero de 1949 MinJusticia.
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